Las noticias que llegaron ayer desde Chicago, la principal plaza de referencia para el precio internacional de la soja, tuvieron un impacto positivo en el precio local de la oleaginosa.
En el mercado de Rosario, el grano cerró la semana en 1.365 pesos por tonelada, el valor más alto de los últimos seis meses. Hay que retrotraerse en el calendario hasta el 4 de marzo, cuando la cotización llegó a 1.387 pesos, para encontrar un valor superior. El mejor precio de 2011 fue 1.470 pesos, alcanzado el 12 de febrero. En el último año, la soja acumula una mejora de 34 por ciento.
Si bien la demanda interna por parte de la industria aceitera se muestra dinámica, la fuerte recuperación que mostró la cotización en Chicago impulsó el valor doméstico del principal producto agrícola. Conformes con ese precio, los productores decidieron ayer desprenderse de alrededor de 25 mil toneladas de soja disponible. La mejora que también exhibió la oleaginosa de la nueva campaña (la que se va a comenzar a sembrar en los próximos días y se venderá en mayo) motivó que los agricultores le pusieran precio -325 dólares por tonelada- a un total de 50 mil toneladas.
El clima complica. En Estados Unidos -principal productor mundial de soja-, la sequía y el fuerte calor que soporta por estos días el cultivo abren interrogantes sobre cuál será la producción en el país del Norte. Las altas temperaturas, que han configurado el verano más tórrido desde 1955, preanuncian rendimientos por debajo de lo esperado en los estados de Illinois e Iowa, los de mayor protagonismo agrícola.
En su último informe del 11 de agosto, el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (Usda) estimó una producción para ese país de 83,17 millones de toneladas, por debajo de los 91 millones de la campaña pasada. Sin embargo, algunos analistas consideran que el clima podría reducir aún más el volumen estadounidense.
La información que viene de los campos se vio reflejada en los precios que muestran las pizarras. En Chicago, la cotización del poroto evolucionó por la conjunción entre los temores que genera el pobre rendimiento de la cosecha y algunas señales positivas emitidas por el mercado financiero.
La soja terminó el día con un valor 519,83 dólares, el segundo precio más alto del año luego del alcanzado el 9 de febrero, cuando registró 521 dólares. “Un aluvión comprador por parte de los fondos reafirmó la tendencia alcista de los precios, en un marco de gran avance en los mercados accionarios y debilitamiento del dólar. Los mercados externos dieron un importante empujón a los productos agrícolas, luego de que el presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, indicara que, si bien no habrá en lo inmediato estímulos adicionales a la economía norteamericana, queda abierta la puerta para futuras intervenciones si la situación económica lo amerita”, informó la corredora Granar.
Sobre cómo se comportará el clima en Argentina en la próxima siembra de soja, los pronósticos avizoran un ciclo Niña (lluvias por debajo de lo normal) pero de baja intensidad entre los meses de noviembre y marzo. En Brasil -el segundo productor mundial de soja-, la sequía está poniendo en peligro las siembras y la producción en los estados de Mato Grosso, Mato Grosso do Sul y Goias.
Fuente: La voz